Estos días que los coches sufren las consecuencias del frío, sobretodo los automóviles que tienen más de 8 años, debemos tener cuidado para que nuestros coches se mantengan en las mejores condiciones. La falta de puesta a punto en algunos vehículos pueden jugarnos malas pasadas, por eso es mejor prevenir esas fatales consecuencias.
Vamos a daros algunas pistas para arrancar el coche de forma segura, porque si el mantenimiento del coche no es el perfecto, podrían aparecer problemas.
Resguardar el coche
Aunque no siempre es posible, si el coche está resguardado tiene más posibilidades de arrancar el coche sin problema, ya que no sufre demasiado las consecuencias del frio. Si tienes que aparcar en la calle necesariamente, lo mejor es buscar un lugar que no esté demasiado expuesto, cerca de edificios y alumbrado público.
Aceite
Si el frio se la ha tomado con tu coche, debes saber que el aceite menos viscoso facilita el arranque en frío. Aunque esta práctica está más extendida en coches de competición dependiendo el lugar donde se corre. También está la opción de los aceites multigrado, pensados para conseguir una mejor viscosidad y así arrancar sin problemas en invierno.
Batería
La batería sufre mucho durante el invierno. Si está muy fría tiene menos poder de arranque que otra más caliente. Un paño caliente y seco sobre la batería durante unos minutos antes de arrancar es una opción para solucionarlo.
Filtros
Los filtros de aire y de combustible deben ser cambiados periódicamente para facilitar el arranque. El filtro de partículas en coches diésel suele dar bastantes problemas.
Solución recurrente
Si finalmente ninguno de estos trucos consigue poner el coche en marcha, puedes buscar una pequeña caída en la calle y dejar el coche caer en punto muerto, la inercia conseguirá que cojas velocidad y si en ese momento metes segunda marcha el coche debería arrancar sin demasiadas complicaciones.
